Es fundamental conocer el protocolo o las normas de etiqueta a la hora de vestirse para cualquier tipo de acto. En la invitación al acto debe figurar el código de vestimenta o las convenciones sobre cómo vestir. Sin duda, pueden generar incertidumbre y, tal vez, resultar desconcertantes.
Puesto que va a reunirse con personas de su sector, de la empresa o incluso con futuros clientes, recuerde que el código de vestimenta para reuniones profesionales no es un asunto trivial.
Cada vez es más importante y destacado tener en cuenta su influencia, proyección, imagen personal, atuendo y estilo de comunicación. Dependiendo de lo que transmita, mejorará su profesionalidad y transmitirá una mayor sensación de confianza, o incluso podría hacer lo contrario y disminuir su credibilidad.
¿Qué significa código de vestimenta?
La forma en que debe vestirse para determinadas circunstancias o reuniones sociales, o incluso profesionales formales, viene establecida por un conjunto de convenciones, costumbres o normas que han sido socialmente reconocidas a lo largo de la historia.
Estas directrices se basan en la consideración hacia los demás, el deseo de presentar una imagen profesional adecuada a la situación y la idea de que su atuendo debe reflejar la formalidad o el evento.
El código de vestimenta debe ser coherente con las normas establecidas por la empresa o su marca, tanto si es empleado, propietario de su propia empresa o tiene una marca personal.
Dependiendo del país, la cultura y la formalidad del evento, la etiqueta de la vestimenta puede cambiar. Un cumplimiento inadecuado de la misma podría provocar desprecio hacia los anfitriones y otros invitados, así como incomodidad y malentendidos.
¿En qué consiste el traje de etiqueta?
El atuendo necesario para asistir a determinados actos o festividades que exigen un tipo de ropa más formal o "protocolaria" que la que se suele llevar se conoce como vestimenta formal, también conocida como código de vestimenta formal.
Normalmente, la etiqueta masculina es posterior o anterior a las normas de vestimenta femenina para un acto formal. Dado que la etiqueta femenina no tiene normas establecidas, a diferencia de la masculina, no existe un atuendo de "etiqueta" femenina.
Pautas para vestir a los hombres
Los modales de los hombres han cambiado significativamente a lo largo del tiempo. Suelen consistir en lo siguiente y son sumamente atemporales y clásicos:
- Frac: Se distingue por los dos faldones independientes que se extienden hasta las rodillas en la parte trasera de la chaqueta, que suele ser negra y llega hasta la cintura por delante. Debido a su absoluta formalidad, sólo se lleva durante los actos y las ocasiones nocturnas en las que se requiere específicamente.
- Chaqué: El chaleco, a menudo en los tonos más adecuados de negro o gris, es el elemento más distintivo de esta indumentaria. Hoy en día, está de moda llevarlo en numerosos colores, sobre todo en tonos pastel, burdeos o azul.
- Esmoquin: Se identifica por el fajín y el moño, ambos a menudo de seda o satén brillante, así como por las solapas de la chaqueta. Aunque es preferible un frac o chaqué para un acto de gala, la formalidad de estas ocasiones se ha relajado. Por este motivo, el esmoquin es una gran elección, sobre todo para las ocasiones de tarde y noche.
- Traje: Suele aconsejarse para reuniones diurnas u ocasiones en las que no se requiere decoro. Incluye saco, pantalón y camisa con o sin corbata. Hay muchas tonalidades diferentes, como gris, azul, beige, arena y negro.
